Fuente:
LA VANGUARDIA
Fecha de publicación:
29 Mayo 2019
El Ejército Nacional Libio (LNA) ha entregado a Egipto a Hisham al Ashmawy, uno de los yihadistas de nacionalidad egipcia más buscados del norte de África, capturado en la ciudad libia de Derna el pasado octubre.
Desde el pasado octubre, Egipto exigía la entrega de Al Ashmawy, antiguo militar egipcio al que se le acusa de inducir diversos atentados en el país árabe, entre ellos el intento de asesinato del que era ministro de Interior, Mohamed Ibrahim.
Egipto "recibió" del Ejército libio, dirigido por el mariscal Jalifa Hafter, hombre fuerte del este de Libia que está capitaneando una ofensiva contra Trípoli, a Al Ashmawy y a Bahaa Ali Ali Abdelmoty, otro extremista "acusado de terrorismo en Alejandría", según la agencia estatal egipcia MENA.
El LNA entregó al yihadista durante la visita del jefe de la Inteligencia General egipcia a Libia, informó MENA.
Por su parte, el presidente de egipcio, Abdelfatah al Sisi, elogió hoy a través de su cuenta de Twitter a sus soldados por ser "halcones que devoran a todos los que quieren aterrorizar a los egipcios".
"La guerra contra el terrorismo no termina y no va a terminar hasta que logremos el derecho de todos los mártires que murieron para la patria", remarcó el presidente.
Se desconoce cuál es el destino de Ashmawy en Egipto.
Al Ashmawy, nacido en 1978 y expulsado del Ejército egipcio en 2011, fue capturado durante una operación emprendida por fuerzas especiales libias en la ciudad de Derna, situada a unos 250 kilómetros al oeste de la frontera con Egipto.
Un tribunal egipcio le condenó a muerte en ausencia en julio de 2014 tras hallarle culpable de la muerte de 22 soldados en el oasis occidental de Farafra.
A Al Ashmawy se le responsabiliza también del asesinato del fiscal general Hisham Barakat y de dos atentados mortales: uno contra la guardia de frontera egipcia que segó la vida de 29 soldados en febrero de 2015 y otro que costó la vida a 29 personas -en su mayoría peregrinos cristianos- en mayo de 2017 en la ciudad de Minya, en el centro de Egipto.
EFE